Un olor puede marcar nuestras vidas. Un solo olor, puede recordarnos eventos y situaciones que están en lo más profundo de nuestros recuerdos. Y más en la Navidad, hay tantos olores característicos. Como por ejemplo, el árbol. Eso sí, si es natural, ya que en la actualidad utilizamos árboles artificiales, de plástico.
Los árboles naturales proveen una fragancia que marca la diferencia en el lugar en que es colocado. Y están los árboles artificiales sin aroma alguno, que dan una apariencia agradable cada año pero sin ser auténtico.
También está el olor de la comida que se está preparando. Y no podemos olvidar el clásico olor a pólvora después de quemar los cuhetes… qué olor ese… Nos recuerda que ya va a ser hora de comer y de que ya va a ser hora de abrir los regalos. No importa en que fecha del año si nuestro sentido del olfato siente uno de estos olores, los recuerdos y la emoción, reviven.
Fuente:http://enhabito.com/navidad-en-junio-olores-de-la-epoca/